martes, 10 de marzo de 2015

OPEN WINDOWS: LA HISTORIA DE HACKER Y CRACKER

El copyright pertenece a sus autores
y/o productoras/distribuidoras
Argumento: Nick, fan de la actriz Jill Goddard, gana el premio de conocerla en persona y poder cenar con ella. Pero todo se complica cuando le comunican que ella ha decidido cancelar la cita. A partir de este momento, se sucederán una serie de hechos que harán peligrar la vida de ambos.

Nos encontramos ante una película española, escrita y dirigida por Nacho Vigalondo, que se dio a conocer con el cortometraje 7:35 de la mañana, nominado a los premios Oscar 2004 en la categoría de mejor cortometraje. Posteriormente, también se encargó la dirección de algunas películas, entre las que destacan Los cronocrímenes y Extraterrestre.

Pese a ser una película española, Vigalondo contó con la participación de actores americanos. Elijah Wood (conocido por su papel de Frodo Bolsón en la trilogía de El Señor de los anillos) da vida a Nick, mientras que la ex actriz porno Sasha Grey encarna a Jill. Como nota curiosa, comentar que también podemos ver a Carlos Areces al principio de la película. En cuanto a las interpretaciones, no tenemos nada del otro jueves, justitas.

La cinta tiene una forma curiosa de estar rodada. El espectador nunca tiene visión directa de los protagonistas, sino que siempre los ve a través de una cámara, una pantalla de ordenador, etc., y está grabada en tiempo real, al mas puro estilo 24. La verdad es que en este sentido es muy original. Y hasta ahí lo mejor de la película, pues todo lo demás parece muy retorcido y demasiado forzado, con giros inverosímiles, hasta el punto que me hizo perder el interés a media película.

Y eso que el guión no pintaba nada mal: una crítica al fenómeno fan, que aprovechó para solaparse con el revuelo montado por el robo de las fotos íntimas de los teléfonos móviles de famos@s. Pero nada más lejos de la realidad. Quizás sea porque me dedico al mundo de la informática y he visto un poco cómo funciona todo este tinglado, pero ya empiezo a estar un poco cansado de esos personajes que pueden hacer cualquier cosa simplemente aporreando un par de veces el teclado de su portátil (porque, no lo olvidemos, muchas de las interpretaciones que vemos se limitan a maltratar un teclado, no a escribir con él). Cuando veo historias de este estilo me canso, me aburro y desconecto. Y precisamente esto es lo que me pasó con esta película, demasiada fantasía en el guión (aunque, de una cosa que ya he visto en más de una persona, sí que nos advierte la cinta: poned un papel tapando la cámara del ordenador... nunca se sabe quien puede estar mirando ;P).

En resumen, una película totalmente prescindible, en la que se tendría que haber madurado un poco más el guión para poder captar el interés del público y hacerlo partícipe de la historia.


No hay comentarios:

Publicar un comentario